Me imagino, porque se que eres un excelente líder y colaborador, que ya están implementando tu proyecto de inteligencia artificial (IA) en tu organización. Existen técnicas que permiten aumentar las probabilidades de éxito en dichas iniciativas, sin embargo, ¿has tomado en cuenta la ética dentro los elementos claves? La IA está transformando nuestras vidas de muchas maneras. Sin embargo, también plantea una serie de desafíos éticos que debemos abordar. En ese sentido debes garantizar que tus plataformas de IA eviten:
- Sesgo: La IA puede reflejar los sesgos de los datos en los que se entrenan. Debes saber elegir las fuentes de datos y “curarlos” de tal manera que garanticen un análisis de datos y aprendizaje del algoritmo libre de sesgos. Se debe evitar a toda costa la discriminación, como a personas de color que son más propensas a ser detenidas por la policía o a personas de bajos ingresos que son más propensas a ser rechazadas para un préstamo.
- Responsabilidad: Los seres humanos debemos tener cuidado en delegar responsabilidad en las máquinas o en los programas informáticos. La IA no debe tomar una decisión que tiene consecuencias negativas o que afecte a los usuarios del sistema. La responsabilidad última, en mi opinión, será siempre de la persona que cree, programe o utilice la herramienta de IA.
- Autoconciencia: El discernimiento ético es algo de humanos. La conciencia es algo que nos distingue del resto de la creación. Debemos saber que en este sentido, la IA ocupará un lugar de apoyo o soporte a nuestros procesos de toma de decisiones y nunca podrá suscituir una conciencia formada dentro de parámetros éticos.
La primera ministra digital de Taiwán, la señora Audrey Tang, afirmó que “la IA tiene el potencial de mejorar nuestras vidas de muchas maneras. Pero también es importante que seamos conscientes de los desafíos éticos que plantea. Si no los abordamos, podríamos crear una tecnología que nos haga más daño que bien”. Coincidimos con esta afirmación. Ya tenemos experiencias de invenciones humanas concebidas para mejorar la calidad de vida de las personas pero que luego son usadas para hacer daño a gran escala, como la bomba atómica. Un empresario, colaborador o líder social debe asegurarse que todo proyecto tecnológico, más si se trata de algo relacionado con IA, se realice e implemente dentro de los más altos estándares éticos. Solo así nos aseguraremos de construir un futuro mejor para todos.
Lecturas recomendadas:
Recomendación sobre la ética de la inteligencia artificial | UNESCO
